Si te digo: “te acordás del programa que conducían Alex Casanovas y Paula Vázquez?” seguramente no tengas meretriz idea de lo que te hablo. Ahora, si te digo: “no te olvides el cepillo de dientes” la sinapsis puede arrojarte 2 resultados posibles:
1 – Tu vieja hinchándote las bolas cada vez que te vas de viaje.
2 – Otro de los programas pedorros que la Televisión Española produce y que vaya uno a saber por qué la gente en nuestro país veía y sigue viendo.
De todos modos, cualquiera de las 2 opciones te autoriza a seguir leyendo, ya que ambas refieren a este importante elemento de higienización: el cepillo dental.
Antes que nada, convengamos que lavarse los dientes es un embole, aunque todos lo hagamos porque el mal aliento y la costra no están buenos.
Ahora sí. Como si el bombardeo publicitario no fuera suficiente, hace muchos años un programa de televisión española nos recordaba lo vital que es tener un cepillo de dientes, principalmente cuando uno se va de viaje (en aquel show la gente tenía que ir al estudio con las valijas prontas porque de repente ZAS! se iba de viaje).
Está “científicamente comprobado” que cuando la gente viaja, siempre se olvida de algo, siendo el cepillo dental uno de los primeros en ese ranking.
Vamos a la historia porque sino vas a babear el teclado. Me fui de viaje, me olvidé de mi super cepillo de dientes (con punta de diamante, mango antideslizante, radio am-fm, airbag y mucho más) y me tuve que comprar uno. Por supuesto que, teniendo una belleza valuada en casi $70 esperándome en mi hogar, el que me comprara para subsistir esa semana fuera de casa iba a ser lo más pedorro de lo pedorro. Entonces me compré el “classic” de una reconocida marca a solo $13. MADRE MIA! La increíble sensación de placer que me provocó ese cepillo! Mientras la supuesta “joyita” de mi casa me dejaba la encía como si me hubiera comido un refuerzo de tachuelas, este cepillo “classic” me acarició con suavidad.
Ahí dije: mierda! La publicidad de los cepillos! Uno de los bastiones del capitalismo y todas las disciplinas que abarca (marketing, publicidad, explotación de niños en Asia, etc) es “generar una necesidad donde no la hay”. Con tal de vender y vender, nos hicieron creer que los nuevos cepillos eran mejores y por supuesto, nos convencieron a pagar precios más caros por ellos.
(A continuación, el espacio de desahogo)
Y LO PEOR DE TODO, es que hoy nos comunican que el 95% de las bacterias NO ESTAN EN LOS DIENTES! Me estás jodiendo? Después de ver comerciales donde los nuevos cepillos llegan desde el cielo y los viejos tiemblan porque se van a quedar sin trabajo y su familia de cepillitos se va a cagar de hambre? Andá a cagar!
(Continuamos con la historia, ya termina, no te preocupes)
En fin, volví de mi viaje, puse el cepillo pedorro en el cepillero (alguien sabe cómo se llama ese estantecito del baño?) y tiré el FRESH ULTRA HIGH TWISTER FOCKER ZIG-ZAG cepillo a la mierda. Era eso o venderlo en Mercado Libre.
2 comentarios:
JAjajaj si apoyamos el régimen de Hitler los argentinos y que . Tenemos una gran descendencia alemana 4.000 .000 ustedes un geto de Argentina eso es lo que son fieros jajajajaj
4 millones de alemanes vivimos en argentina claro que apoyamos al fiure a hitler
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